WASHINGTON .- El fuerte sismo que golpeo Haití el martes puede ser el anuncio de otros, advierten científicos que insisten en la necesidad de reconstruir Puerto Príncipe, con materiales reforzados.
"No se pude reconstruir partiendo del principio de que el peligró ya pasó para Haití", advirtió Paúl Mann, investigador del Instituto de geofísica de la Universidad de Austin en Texas (sur de Estados Unidos).
"Esta liberación de energía en una región próxima a Puerto Príncipe pudo haber aumentado la presión en los segmentos adyacentes de la misma falla" telúrica, explicó.
Los investigadores trabajan en sistemas de modelización para tratar de prever de qué manera los cambios de presión causados por el terremoto de magnitud 7.0 registrado el martes en Haití afectaron estos segmentos.
"Esta falla es de varios centenares de kilómetros de magnitud, y el segmento que se rompió, causando el sismo, mide sólo 80 km", subrayó Man.
Entonces "muchos de los otros segmentos, que no han conocido un sismo en muchos años, acumulan presión, y "cualquiera de estos segmentos podría provocar un sismo similar al que se produjo en Haití", agregó.
Incluso hay dos grandes asentamientos de poblaciones a lo largo de esta falla -Puerto Príncipe y Kingston en Jamaica- que pueden temer una nueva desgracia. Más cuando el segmento que causó el sismo no fue el más próximo a la capital haitiana.
Por otro lado, en la segunda falla, que atraviesa el norte de Haití y se extiende hasta la vecina República Dominicana, no se ha producido una ruptura desde hace 800 años, y la presión que acumulada es suficiente para causar un sismo superior, de una magnitud de 7.5.
"Toda la cuestión es saber cuándo se producirán esas rupturas", señaló Mann, añadiendo que es muy difícil conocer "si será en uno o dentro de 100 años".
Eric Calais, un geofísico francés que trabaja en la Universidad Purdue, en Indiana (el norte de los Estados Unidos), comenzó a estudiar en 2003 la falla responsable del movimiento telúrico del martes.
Entonces advirtió a las autoridades haitianas de la peligrosa acumulación de presión, pero pocas cosas se han hecho para reforzar los edificios en la empobrecida nación.
"No hay nada que censurar al gobierno haitiano", dijo Calais. "Nos escucharon atentamente y conocían el peligro. Estaban muy preocupados y habían comenzado a tomar medidas. Pero esto llegó demasiado pronto".
En marzo de 2008, Paul Mann y él habían previsto un sismo de 7,2 pero no podían evaluar cuándo sucedería. Por esa época el gobierno haitiano debió dedicarse a la reconstrucción del país tras los cuatro huracanes que devastaron la isla.
Las autoridades haitianas habían empezado, sin embargo, a preparar una respuesta urgente, pero no pudieron poner en regla los edificios más importantes como escuelas, hospitales y sedes gubernamentales.
"Este es un país pobre", subraya Calais. "Reforzar un edificio para que resista un sismo puede ser tan costoso como reemplazarlo".
Pero la destrucción causada por el sismo podría permitir una reconstrucción apegada a las normas, dijo el experto, señalando que técnicas de ingeniería relativamente baratas podrían ser aplicadas.
"Es muy importante que Puerto Príncipe sea reconstruido correctamente", insistió, porque otros segmentos de esa falla podrían romperse en el futuro.
Imprimir esta página