El gobernador Luis Fortuño declaró estado de emergencia en los municipios de San Juan, Cataño, Guaynabo y Toa Baja por lo que podrán recibir fondos federales de ayuda de parte de la Agencia federal para el Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés).
El humo generado por el incendio en la refinería Gulf en Cataño representa una amenaza ambiental y podría afectar los cuerpos de agua de la isla y la salud de los habitantes, por lo que las autoridades han indicado que diversas comunidades cercanas al área tienen que ser desalojadas.
Mientras que una portavoz de la empresa Gulf dijo que sus directivos han estado trabajando con las autoridades desde que comenzó el incendio, pero que aún es muy prematuro conocer las causas del mismo.
“El incendio no se ha extinguido; una vez se apague podremos darle velocidad a la investigación. La empresa comunicará los resultados. La prioridad ha sido extinguir el incendio y tratar de que el daño sea el menor posible”, expresó Frances Ríos, relacionista pública de la empresa.
Aseguró que Gulf tiene todos sus permisos estatales y federales en orden y que siempre han mantenido estrictas medidas de seguridad.
“Un empleado se percató de lo que ocurría y se comunicó con la alta gerencia. Ninguno de los cinco empleados de turno resultó lesionado”, agregó la portavoz, quien no ofreció un estimado de los daños.
Fortuño informó que 130 bomberos y 22 camiones bomba continúan trabajando en el lugar y que se desalojó un sector del barrio Amelia.
“Son entre 1,000 a 1,500 personas del sector Sabana del barrio Amelia que fueron trasladados para el coliseo Mario 'Quijote' Morales en Guaynabo”, dijo el Mandatario.
Poco después de la medianoche, una potente explosión en los tanques de la refinería Gulf en Cataño estremeció toda la zona metropolitana. Inmediatamente se desató un fuego de grandes proporciones que, hasta este momento, ha dejado a dos personas heridas y que activó todo el aparato de emergencia gubernamental. A las 3:40 de la madrugada se sintió otra explosión adicional y entre 4:50 y 4:44 de la mañana se registraron otras tres explosiones seguidas. Explosiones posteriores se han desarrollado durante el transcurso del día.
Ya son 15 los contenedores que han colapsado, de un total de 40. Las farmacéuticas Abbott y Pfizer enviaron sus camiones de incendio y la Guardia Nacional tiene un camión para tirar “foam” en el área. La planta Bacardí envío también un camión al área, pero el mismo está de regreso en su instalaciones en labores preventivas.
José Otero, Jefe Auxiliar de Extinción del Cuerpo de Bomberos dijo que estaban verificando unas líneas que van hasta Cataño. Dijo que estaban calientes pero que no tenían fuego.
El fuego es intenso y la llamarada es más alta de que la chimenea de la refinería. Hay más de 200 personas refugiadas en la cancha bajo techo de Cataño que fueron desalojadas de las comunidades cercanas. La autopista De Diego, la PR-5 y la PR-28 están cerradas. Se informó que no habrá clases en las escuelas públicas de Cataño, Guaynabo, Bayamón y San Juan. Se teme que se trate de la emergencia ambiental más grande en los últimos años en Puerto Rico.
La Guardia Costanera anunció el cierre de la bahía de San Juan. Los bomberos se concentran en mantener confinado el fuego y los tanques fríos.
A eso de las 7:00 de la mañana el Jefe del Cuerpo de Bomberos, Pedro Vázquez, no descartó que puedan haber más tanques incendiados porque no tienen visibilidad aérea. No obstante expresó que hay mucha preocupación con uno de los tanques que está muy cerca de los almacenes del Fuerte Buchanan. “Vamos a tomar medidas para combatir el incendio en ese tanque. Se está tratando de mantener el área fría”, expresó Vázquez. No descartan desalojar esa sección del Fuerte Buchanan. Mencionó que hay áreas verdes a través de las que se puede propagar el fuego. Sin embargo, indicó que el incendio está bajo control.
A las 2:30 de la madrugada, el superintendente de la Policía, José Figuera Sancha dijo que habían once tanques en llamas, del total que sobrepasa los 30. Minutos más tarde, el presidente de la Junta de Calidad Ambiental (JCA), Pedro Nieves Miranda, confirmó que personal de la Gulf reportó que eran doce los tanques en llamas. Se desconoce la cantidad exacta de combustible que se almacenaba en el lugar.
Las fuentes de EL VOCERO siempre han asegurado que son más la cantidad de tanques incendiados. EL VOCERO supo que las primeras dos líneas de tanques se incendiaron, con un total de 23 los tanques a donde llegó el fuego. El fuego no había llegado a una tercera hilera, en la que hay nueve tanques. En las primeras dos líneas de tanques los combustibles son gasolina, combustible de aviación, diesel y el llamado número 6.
“Estamos hablando de miles y miles de galones de combustible”, expresó la fuente de EL VOCERO que trabaja en estos momentos en el área.
Solucionado el problema del agua
El director auxiliar de la región metro de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), Javier Rivera William, expresó que los hidrantes y líneas que llevan agua internamente en la refinería lograron abrirse por lo que pudieron empezar a enviar flujo de agua desde un tanque de cinco millones de la propia refinería. Ese tanque a su vez se suple de una tubería de 12 pulgadas de la AAA. El funcionario de la AAA dijo que hay suficiente agua disponible y camiones cisterna para atender la emergencia.
Durante la madrugada el incendio fue más difícil de apaciguar debido a problemas con el agua y los sistemas de tuberías dentro de la instalación. Una fuente de EL VOCERO, que labora en la emergencia, explicó que la Gulf tiene un tanque de cinco millones de galones diarios de agua (ngd) disponible pero tenía cerrados sus tuberías e hidrantes lo que imposibilita trasladar el agua desde ese punto. “Está bien difícil bregar con ellos; no están cooperando”, indicó la fuente, previo a que se solucionara el problema del agua.
El jefe de los Bomberos, Pedro Vázquez, confirmó los problemas del agua en las instalaciones de la refinería. Dijo que desde que se inició el fuego a las 12:30 de la madrugada la instalación se quedó sin agua, situación que ya fue solucionada.
Desde las 4:50 de la mañana se han escuchado al menos seis nuevas explosiones en el lugar. El Jefe de Bomberos indicó que el fuego está confinado, pero no descartó que tengan que solicitar helicópteros de la Guardia Nacional o de otras autoridades para lanzar agua desde el cielo.
La Unidad de Operaciones tácticas custodia un perímetro y hay unidades de emergencia de pueblos tan lejanos como Arecibo y Ponce.
En el lugar se encuentra Jane Erickson, alta funcionaria del FBI; además miembros del Coast Guard, el Homeland Secutity y el Servicio de Inmigración y Aduanas.
EL VOCERO pudo observar cuando sacaron los camiones que distribuyen gasolina, que se encontraban en las facilidades de la Gulf. Figueroa Sancha anticipó que tomará varios días apagar el fuego que se extiende una milla a la redonda. Explicó que tratan de mantener fríos los más cercanos a las comunidades aledañas.
El Jefe de la Uniformada adelantó que los tanques estarán uno o dos días quemándose. Explicó que en algunos casos habrá que dejar que se queme todo el combustible. A las 3:20 de la madrugada, ni el Superintendente, ni el secretario de Justicia, Antonio Sagardía, quisieron hablar de causas o posible mano criminal en la explosión. Dos agentes del FBI llegaron al área del fuego.
Primeros momentos de la explosión
En el momento inicial de la explosión, los cristales de las residencias cercanas a la planta explotaron, al igual que los vidrios de los carros que pasaban por la zona. De hecho, los residentes del Condominio San Francisco en Caparra y de las comunidades de Puente Blanco y Cucharillas en Cataño fueron evacuados de inmediato ante el riesgo de que se extendiera el fuego. Las autoridades cerraron todas las vías que dan acceso a la planta, entre ellas la PR 5, la PR 28 y la autopista José de Diego. Unas 85 personas fueron evacuadas del Alberge de Testigos del Departamento de Justicia que ubica cerca de la zona.
A la 1:20 de la madrugada, los bomberos no habían podido entrar al lugar del siniestro por el intenso calor. Se solicitaron refuerzos de bomberos de toda la Isla. A esa hora llegó el superintendente de la Policía, José Figueroa Sancha. Un helicóptero sobrevolaba la zona.
“Tenemos la comunidad de Puente Blanco cercana, necesitamos que todos los residentes de Puente Blanca se salgan de sus casas por el humo”, dijo de inmediato Figueroa Sancha. Explicó que verificaron las rutas de vuelo de aviones que pasaran por la zona y que en ese momento no había indicación de que se tratara de una aeronave que se hubiese estrellado en la zona. Más adelante confirmó que se descartaba que el incendio estuviese relacionado con un avión perdido de Spirit Airlines. Específicamente dijo que habló con el director de la Autoridad de los Puertos Alvaro Pilar sobre el vuelo 837 de la línea aérea. “Todos los vuelos se confirmaron que llegaron incluyendo el de carga. Ahora mismo estamos evaluando la situación, estableciendo el centro de mando”, dijo el Superintendente.
Desde La Fortaleza se activaron a todos los jefes de agencia de seguridad para lidiar con la emergencia. A las 2:20 de la madrugada, además de Figueroa Sancha se encontraban en la zona los secretarios de la Gobernación, Marcos Rodríguez Ema, de Justicia, José Antonio Sagardía, el del Departamento de Transportación y Obras Públicas, Rubén Hernández Gregorat, el de Salud, Lorenzo González, el director de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias, Heriberto Saurí y el presidente de la JCA, Pedro Nieves Miranda. El Jefe de la Policía dijo que era muy prematuro hablar de cualquier origen del siniestro. Los alcaldes de San Juan, Jorge Santini y de Guaynabo, Héctor O’Neill también llegaron al lugar.
Se informó que de los tanques en llamas, al menos dos, están llenos de combustible. El secretario del DTOP anticipó que la PR 22, la PR 28 y la PR 5 permanecerán cerradas indefinidamente. Hernández Gregorat recabó a las personas de la zona Norte que no tengan que llegar a San Juan hoy viernes a que no lo hagan. Explicó que para quienes no puedan posponer sus gestiones tendrán como rutas alternas la PR 2 y la PR 165. “Toda la persona que mañana no tenga una emergencia que ir a trabajar, le estamos pidiendo que se queden en su casa”, exhortó Figueroa Sancha. El alcalde de Bayamón, Ramón Luis Rivera dijo que toda la policía municipal dará apoyo en el manejo del tránsito.
El presidente de la JCA calificó la situación como una emergencia ambiental de grandes magnitudes. El ex funcionario de la Agencia Federal de Protección Ambiental dijo que se trata de la emergencia ambiental más grande desde que encalló la embarcación Morris Berkam en la bahía de San Juan a principios de la década de los 90. “Esperemos que esto no sea tan serio”, dijo Nieves Miranda. Explicó que pidieron al Servicio Nacional de Meteorología modelos del viento y que afortunadamente, en este momento sopla hacia el noroeste.
También dijo que cerraron la línea desde donde se envía combustible de los muelles hasta Capeco. Nieves Miranda dijo que no se ha podido determinar si hubo derrame, pero monitorearán las escorrentías que llegan a las quebradas y humedales cercanos, y a la bahía de San Juan.
Personas desde puntos tan lejanos como Trujillo Alto y Bayamón dieron testimonio del estremecimiento que se sintió con la explosión. El fuego se esparció rápidamente y las llamas podían verse desde varios puntos de la Capital. Decenas de patrullas y camiones de bomberos llegaban al lugar poco después de la explosión. Los residentes de Cataño, Bayamón y San Juan relataron que se sintió como un fuerte temblor con réplicas.
Se supo que la mayoría de las reservas de petróleo de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) se almacenan en los tanques de la refinería Gulf, cuyo nombre es Caribbean Petroleum Corporation (CAPECO). El secretario del DTOP anticipó que estarán monitoreando las carreteras por donde discurren tuberías para transportar combustible hasta y desde CAPECO.
Vecinos del lugar relataron los momentos en que explotaron las ventanas de sus casas, mientras que una persona que transitaba cerca y cuyos vidrios del vehículo explotaron dijo que el calentón se sintió de inmediato. Hay vehículos destrozados en la zona. Un oficial de la Policía que llegó a la zona confirmó de inmediato que había heridos entre los conductores que pasaban al momento de la explosión. El secretario de Salud dijo que estaban listos para atender heridos en el Centro Médico de Río Piedras, sin embargo no fue necesario activar un plan de emergencias porque los dos heridos fueron leves y recibieron atención en CDTs.
Miguel Márquez, quien transitaba por la zona luego de salir de un estudio de grabación, dijo que vio una nube amarrilla en el piso y aceleró su vehículo cuando en cuestión de cinco segundos todo el vehículo se estremeció. Márquez tomó una foto en el momento desde el interior de su auto. Márquez lucía nervioso, pero no sufrió heridas.
En la Comandancia de Bayamón, ubicada en la PR 5, se cayeron plafones del techo por el estremecimiento de la onda expansiva. Periodistas de Red 96, que ubica en el Parque Industrial Amelia, relataron que los cristales de sus puertas explotaron y tuvieron daños en el techo. Algunos postes del alumbrado cayeron en la PR 28.
Ya en horas de la madrugada, se observaron largas filas en estaciones de gasolina. Los oficiales de gobierno descartaron que vaya a surgir una escasez de gasolina, ya que hay otros puntos por dónde llega y se distribuye la gasolina.
En esta historia colaboraron: Miguel Rivera Puig, Tomás de Jesús Mangual, Melissa Correa Velázquez, StephanieGómez, Maricelis Rivera Santos, Milly Méndez, Rafael Morales, Vicente Toledo y Aiola Virella. Información también de AP.
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